“El colectivo de managers somos el alma de las empresas”
Desde la CEC European Managers hemos tenido la oportunidad y el placer de entrevistar a Juan Antonio González Barriocanal, Secretario General de nuestra organización miembro en España, la Confederación de Cuadros y Profesionales – CCP. Con él conversamos acerca de la importancia del diálogo social europeo, la colaboración entre organizaciones sindicales y el rol de los managers en las empresas.
Buenos días Juan Antonio, y muchas gracias por dedicarnos tu tiempo. ¿Cómo te gusta presentarte?
Soy un apasionado de lo que hago. Es lo que me permite mantener una agenda cargada de actividades. En particular, todo lo relacionado con las relaciones sociales.
En mi larga carrera profesional, de más de 40 años, los últimos 20 años han estado muy involucrados con la actividad sindical nacional y europea.
Mi actividad profesional se desarrolla en el área de Riesgos del Grupo Iberdrola. En el plano sindical soy Secretario General de la Confederación de Cuadros y Profesionales – CCP y miembro del Comité de Control Financiero de CEC European Managers.
¿Puedes compartir un ejemplo de una decisión difícil que hayas tenido que tomar como líder?
La decisión más complicada que he tenido que tomar ha sido tener que presentar una demanda penal contra los directivos de una empresa multinacional.
Una negligente gestión en un proceso industrial causó el despido de 600 trabajadores y trabajadoras y el cierre de dos plantas industriales. Ante una decisión estratégica de la empresa que entendimos tenía una base delictiva, no tuvimos otra alternativa que iniciar acciones legales.
Como consecuencia de la estrategia jurídica que seguimos se consiguió incrementar significativamente las indemnizaciones que recibieron nuestros afiliados. Fueron unos meses estresantes.
En CCP entendemos la acción sindical como una necesaria negociación hasta llegar al mejor acuerdo posible. Sin embargo, si no nos dejan otra opción siempre actuaremos en defensa de nuestros afiliados y representados.
En España – como en otros países europeos – sigue existiendo una incomprensión empresarial de la sindicalización de los cuadros y profesionales. ¿Qué significa formar parte de la categoría de cuadros y profesionales?
El colectivo de cuadros, managers y profesionales con una alta cualificación y responsabilidad, somos el alma de las empresas, somos los gestores del conocimiento y el engranaje necesario para un adecuado funcionamiento.
No se puede entender la gestión y la operación de una empresa sin nuestro colectivo. Los managers, cuadros y profesionales gestionamos, aportamos ideas y establecemos las líneas estratégicas del futuro de las compañías.
Sin embargo, desde la alta dirección de las empresas se ha considerado que nuestro colectivo estaba muy bien retribuido, incluso demasiado, y que su participación no era acorde a su aportación en la creación de valor de las empresas. Lo que es un error estratégico, que tendrá sus consecuencias en el corto y medio plazo.
Se trata de una corriente que viene de los Estados Unidos, utilizada principalmente en empresas tecnológicas. El principal error es tratar de gestionar empresas industriales como si fueran startups.
La rapidez de los avances en una empresa tecnológica aconseja una renovación y actualización continua de los managers o técnicos. Sin embargo, para la gestión de una empresa industrial se necesita contar con cuadros y profesionales que tengan además de una adecuada cualificación profesional, un experiencia y conocimiento de las empresas superior.
La experiencia y conocimiento del manager tienen un valor incalculable…
Sí, contar con adecuado “expertise” es básico en este tipo de empresas. Los managers evitamos errores en el futuro porque conocemos lo acontecido en el pasado.
¿Y en el sector tecnológico no es tan importante?
En el sector de las empresas tecnológicas las empresas se gestionan de otra forma, es un sector más fluido y cambiante, con una aceleración de la utilización de la inteligencia artificial.
Las grandes empresas industriales, las grandes empresas del sector de la automoción, siderúrgicas, eléctricas o energéticas no pueden gestionarse con una visión de corto plazo.
Necesitan inversiones intensivas de capital y una adecuada visión estratégica que determinará el futuro de las empresas. Los managers, cuadros, técnicos y profesionales somos los que podemos aportar esta necesaria visión.
¿Por qué es importante para España que exista una organización como la CCP?
En España hoy es más necesaria que nunca una organización como la nuestra, que conoce los problemas a los que se enfrenta el colectivo de managers y profesionales cualificados.
Una cultura laboral muy estresante y exigente, con un alto nivel de responsabilidad que asumimos los managers, si no se gestiona adecuadamente, con cargas de trabajo razonables, puede representar un peligro para la salud.
El estrés, y sus enfermedades derivadas, provocado por una mala organización y gestión del trabajo, se va a convertir en la principal causa de muerte en los próximos años, tal y como se pone de manifiesto en informes de organizaciones tan prestigiosas como la OIT (organización Internacional del Trabajo).
Por eso creemos que es importante trabajar en la prevención y promoción de la salud, para prevenir problemas futuros, también para garantizar la productividad de las empresas.
Por otro lado, la voz del colectivo de cuadros y profesionales en el diálogo social en España está representada por CCP. Nuestra participación en distintos foros y reuniones con representantes de las Administración General y Autonómica ponen de manifiesto el absoluto desconocimiento de la problemática de un colectivo cada vez más abandonado por la alta dirección de las empresas.
Buena prueba de ello ha sido, entre otras, las reuniones que hemos mantenido con la Dirección General de Trabajo y la Dirección General del Servicio de Empleo de la Comunidad de Madrid en las últimas semanas.
CCP ofrece soluciones a los problemas laborales de nuestro colectivo de los que nadie quiere hablar, ni poner encima de la mesa, siendo útiles y necesarios en las mesas de negociación sindical.
Los mensajes que trasladamos son pragmáticos y siempre enfocados a encontrar soluciones.
¿Hay algún problema principal que siempre pongáis sobre la mesa?
Nos preocupa, especialmente, un diálogo social en España que no tiene en cuenta la voz de los managers.
Así como los temas de prevención de riesgos laborales, en particular, los provocados por el estrés laboral entre los trabajadores en general, y principalmente en el colectivo de los managers, cuadros y profesionales.
Hace unos días nos reuníamos en Bruselas con el Director General de DG EMPLOYMENT de la Comisión Europea y nos comentaba que “los managers sois influencers”, ¿crees que también lo sois respecto a la relación de vuestros equipos con el trabajo?
Sin duda, somos modelos que los miembros de nuestros equipos siguen, y debemos practicar con el ejemplo, previniendo el “burn out” y promoviendo el bienestar en el trabajo, empezando por nosotros mismos.
Insisto, hay que realizar un adecuado análisis de la organización del trabajo, para determinar si hay un problema de liderazgo o de una inadecuada gestión laboral.
A partir del análisis, buscar estrategias para resolverlo.
¿Qué debería aprender España del modelo de diálogo social europeo?
España necesitaría fomentar un diálogo social más participativo. Hay que contar con las organizaciones mayoritarias, sin duda, pero sin olvidar un amplio espectro de organizaciones sindicales plurales que deberían tener voz en el diálogo social en España.
Una adecuada participación de distintos colectivos, así como, una mayor diversidad de ideas enriquece el dialogo social.
Los problemas complejos necesitan soluciones complejas, y los managers y cuadros profesionales somos los responsables de implementar muchas de las soluciones que se proponen.
Hay que contar, también, con nuestro colectivo.
En la Unión Europea se entiende la pluralidad sindical. La CEC European Managers está reconocida como agente social de referencia para la Comisión Europea y participa en consultas oficiales, y en diálogos y negociaciones tripartitas con las instituciones comunitarias.
En Europa se entiende esa diversidad. Sin embargo, en España, en este momento, no encontramos la misma interlocución que sí tenemos en la UE.
La legislación, que afecta al mundo laboral, se debería circular entre las organizaciones que representamos a los trabajadores para poder emitir una opinión y propuestas al respecto, como se hace en Europa.
No es aceptable ni serio que los managers, que vamos a estar a cargo de implementar y garantizar el buen funcionamiento de los cambios en el marco laboral nos enteremos de los mismos por la prensa.
En Europa, cuando hay propuestas para cambiar directivas o negociaciones, se consulta con todos los agentes sociales implicados.
¿Crees que cuestiones como el teletrabajo, la reducción de la jornada laboral o el telemanagement pueden afectar a la productividad?
La productividad se logra mediante procesos de trabajo eficientes, equipos comprometidos y una adecuada organización laboral, permitiendo trabajar menos horas sin sacrificar resultados.
Se está debatiendo la posibilidad de semanas laborales más cortas, como la de cuatro días, y algunos estudios muestran que esto puede aumentar la productividad.
Sin embargo, en sectores como el turismo y la restauración, predominantes en España, implementar estas medidas es complejo, ya que pequeñas empresas y pymes tienen limitaciones estructurales que dificultan reducir jornadas sin afectar su operatividad.
Por otro lado, el teletrabajo es viable y beneficioso en muchos casos, especialmente cuando se gestiona por objetivos y se cuenta con equipos comprometidos.
No es necesario que los empleados estén físicamente en la oficina si pueden cumplir con sus metas y plazos desde casa. Los managers podemos ayudar con una buena gestión, sin olvidar que en sectores como el industrial o de servicios presenciales el teletrabajo no es factible.
En el último número de vuestra revista indicáis que “Las extinciones de contratos por no superar el período de prueba se han incrementado un 902,6%, las bajas “voluntarias” un 258,7%, los despidos por causas objetivas un 234,7% y los despidos disciplinarios un 170%”, una situación causada por la falta de una legislación realista. ¿Qué proponéis?
El mercado laboral en España está siendo distorsionado por la contratación de trabajadores fijos discontinuos, un modelo que permite emplear a una persona de manera intermitente, sin que esta figure oficialmente como desempleada entre contratos.
Aunque este sistema ofrece flexibilidad a las empresas y reduce artificialmente las cifras de paro, no refleja la realidad laboral del país, ya que muchos de estos trabajadores pasan largos periodos sin empleo efectivo mientras perciben prestaciones, lo que genera datos de paro inexactos y una percepciónn engañosa de mejora laboral, especialmente a nivel europeo.
Este tipo de contrato sustituye a los antiguos contratos temporales, pero con una falta de claridad sobre el estatus real de los trabajadores.
Aunque la contratación indefinida parece haber aumentado, en realidad muchos de estos contratos son discontinuos y no garantizan estabilidad laboral.
Esto crea una situación en la que ni los empresarios ni los trabajadores tienen plena seguridad, afectando la transparencia del mercado laboral y dificultando la evaluación de su funcionamiento. Además, este modelo permite manipular estadísticas laborales con fines políticos, mostrando un panorama más positivo que la realidad.
Por otro lado, esta situación también incide en la productividad, pues las condiciones laborales inestables y el encadenamiento de bajas voluntarias por motivos diversos afectan significativamente los resultados.
Las estadísticas, aunque útiles, pueden ser manipuladas para mostrar lo que conviene, y por eso es necesario abordar esta problemática con seriedad y establecer una legislación laboral realista y transparente.
Es fundamental que las cifras que se presentan reflejen la verdadera situación del mercado laboral, en lugar de priorizar objetivos políticos o una mejor imagen ante la Unión Europea.
¿Por qué es importante para la CCP el hecho de formar parte de la CEC European Managers?
La Confederación de Cuadros y Profesionales (CCP) se fundó en 1985 y este año celebra su 40 aniversario. En 1988, se integró en la CEC European Managers, evidenciando desde sus inicios una visión clara de la importancia de Europa como futuro económico y político.
Los fundadores comprendieron que la integración de los países europeos crearía una comunidad sólida, no solo en términos económicos, sino también como un proyecto político significativo.
La CCP siempre ha adoptado una postura europeísta, considerando que el avance y la unión de Europa benefician a sus países miembros.
Como organización, la CCP aboga por la armonización del mercado laboral europeo, promoviendo contratos laborales con características comunes entre países como Noruega, Francia o España, ya que enfrentan problemáticas similares.
Esta visión busca mercados más amplios y regulaciones laborales que permitan una mayor integración. Reconociendo que no pueden actuar solos a nivel europeo, la CCP identificó a la Confédération Européenne des Cadres (CEC European Managers) como su homóloga para representarlos en ese ámbito, consolidando su compromiso con el modelo de la Unión Europea.
La CCP es una firme defensora de su participación activa en CEC European Managers, pues considera que dicha colaboración tiene un impacto directo en el fortalecimiento de sus objetivos en España.
La integración en la CEC refuerza el vínculo entre las organizaciones europeas y promueve beneficios mutuos, reafirmando el compromiso de CCP con una Europa más unida y desarrollada, tanto en términos laborales como económicos.
Como sabes, en nuestra confederación hay organizaciones que están trabajando activamente en el ámbito del Liderazgo Climático (Climate Leadership). Nuestro secretario general incluso participó en la COP 29, y en la última asamblea general tú mencionaste, refiriéndote a lo ocurrido en Valencia hace unos meses, que el cambio climático es uno de los grandes desafíos de España. Desde tu perspectiva, ¿qué papel pueden desempeñar los cuadros españoles desde sus posiciones para contribuir en este ámbito?
El cambio climático es una realidad innegable que afecta al planeta. En España vemos los efectos de la desertificación, el aumento del nivel del mar y eventos meteorológicos extremos.
No podemos ignorar este problema ni actuar como si no existiera, ya que las consecuencias serán cada vez más graves. Aunque algunos intereses económicos o posturas populistas intenten restarle importancia, es fundamental reconocer la urgencia de tomar medidas desde todos los ámbitos, incluidas las organizaciones y sus miembros.
La Unión Europea ha liderado históricamente la lucha contra el cambio climático, impulsando acuerdos como el de París o Kioto y estableciendo medidas clave para mitigar sus efectos. Este liderazgo debe mantenerse.
En este contexto, los cuadros y profesionales españoles tienen un papel importante en sensibilizar y promover acciones que contribuyan a mitigar el cambio climático. Desde nuestras posiciones, podemos impulsar propuestas y medidas concretas que favorezcan prácticas sostenibles en las empresas y la sociedad en general. Es esencial no dejarse influir por discursos negacionistas, sino basarse en las evidencias científicas y en las proyecciones que advierten sobre el impacto del cambio climático en un futuro cercano.
Cualquier esfuerzo, por pequeño que sea, es valioso. Nuestro deber no solo es reconocer el problema, sino también actuar de manera responsable para dejar un mundo mejor a las generaciones futuras.
No se trata de simplificar la gravedad del cambio climático, sino de enfrentarlo con compromiso, promoviendo cambios que, aunque puedan parecer difíciles a corto plazo, son necesarios para garantizar un planeta habitable a largo plazo.
¿Cuál es la aportación de los cuadros españoles respecto al debate de la competitividad que se ha lanzado desde Bruselas?
Durante años, Europa ha permitido la subcontratación de sectores clave, como la fabricación de baterías y paneles solares, a países como China, India, etc. priorizando costos más bajos a expensas de la seguridad laboral, la calidad y el control sobre estas cadenas de suministro.
Un claro ejemplo de las repercusiones fue la crisis de los microchips, que paralizó, entre otras, fábricas de vehículos durante semanas, demostrando los riesgos de depender de terceros en procesos críticos.
Esta dependencia ha llevado a reconocer la necesidad de recuperar el control sobre industrias estratégicas dentro de la Unión Europea.
Países como Francia ya están avanzando con proyectos para construir fábricas de baterías, y España también se beneficiará de este tipo de iniciativas.
Pensamos que la Unión Europea debe proporcionar fondos que impulsen esta reindustrialización, no solo para garantizar la estabilidad tecnológica y económica, sino también para reducir el desempleo y evitar una descapitalización industrial que comprometa el futuro de los países miembros.
Europa ha adoptado durante mucho tiempo una postura pacifista, dejando nuestra defensa en manos de Estados Unidos, pero los actuales desafíos geoestratégicos indican que es fundamental prepararse para un futuro más incierto.
Europa necesita mayor autonomía económica y tecnológica, solo así contribuiremos a un desarrollo más sostenible, a fomentar el empleo y la seguridad en un panorama global cada vez más complejo y competitivo.
¿Qué mensaje te gustaría mandar a otras organizaciones de líderes que estén pensando en unirse a la CEC?
La CEC European Managers es una organización esencial para defender los intereses de managers, cuadros, técnicos y profesionales en toda Europa.
Como uno de los seis interlocutores reconocidos a nivel europeo, tiene la capacidad de aportar claridad y soluciones a las problemáticas comunes que enfrentan estos colectivos en diferentes sectores y países, gracias al intercambio de ideas y debates entre sus miembros.
Una de las fortalezas de esta confederación es su enfoque multisectorial y su representatividad en empresas con presencia internacional. Esto permite conocer y aprender de las estrategias que estas mismas empresas están implementando en otros países, favoreciendo un enfoque más global y coordinado para enfrentar desafíos comunes.
La profesionalidad y experiencia de los gestores que lideran la CEC European Managers refuerzan su capacidad para representar de manera efectiva a sus miembros.
Esto garantiza que los intereses de los técnicos, managers y profesionales estén bien defendidos en el ámbito europeo, promoviendo soluciones y estrategias que beneficien a todos los sectores implicados.
¡Muchas gracias!
